sábado, 9 de octubre de 2010

El HMS Starling y la guerra submarina


El HMS Starling demostró ser un implacable adversario de las "manadas de lobos" de submarinos alemanes durante la Batalla del Atlántico.

El Starling comenzó a navegar como el barco nº 11701 construido en los astilleros de Fairfield, Clydeside. Era una "corbeta" o navío de escolta de tarea general, de la clase Black Swan, de un pedido de 10 barcos con arreglo al programa de guerra suplementario de 1940. Estos pequeños barcos resistentes se habían desarrollado antes de la guerra y su diseño demostró una notable previsión: tenía tres dobles cañones antiaereos de 101,6 mm y un dispositivo "pom-pom" múltiple para lanzar cargas de profundidad, así como un sensor Asdic submarino. Si tenían un fallo era el de ser demasiado buenos. Eran demasiado complejos para la producción masiva y hubo que diseñar modelos más simples de fragatas para completar el número. El día de la victoria en mayo de 1945, el Starling tendría en su haber 16 submarinos hundidos, y la marca personal de su capitán, Frederick Walker, incluía otros 9 submarinos hundidos por barcos bajo su mando.

HMS Starling
Nacionalidad: Gran Bretaña
Dotación: 192 tripulantes
Dimensiones: 90 m. eslora; 11,7 m. manga; 2,7 m. calado
Peso: 1.350 toneladas.
Velocidad: 20 nudos
Armamento: 6 cañones de 102 mm. y 12 ametralladoras antiaéreas de 20 mm.



Acabando con el dominio total

Para finales de 1942, los submarinos alemanes habían hundido 3862 navíos mercantes con una pérdida de sólo 152 unidades propias. Al iniciar la guerra con 46 submarinos operacionales, el Almirante Dönitz había aumentado la fuerza hasta más de 600 submarinos, y la entrada de los EE.UU. en la guerra había aportado una rica cosecha de navíos de suministro sin escolta. En 1943, losa ataques "manadas de lobos" de Dönitz en el Atlántico,en los que unos 20 submarinos en superficie convergerían en un convoy de noche, se vieron cada vez más dificultados por un número de factores. La aviación americana y los navíos de escolta, equipados con radar y otro material buscador de objetivos, se desplegaban en patrullas intensivas sobre las zonas de caza de los submarinos, obligando a las flotillas de submarinos a sumergirse, donde su velocidad y flexibilidad operacional se reducían mucho. También, se estaban interceptando informes alemanes de espionaje, permitiendo a los convoyes hacer modificaciones tempranas en sus rutas para evitar las concentraciones de submarinos. Finalmente, el Atlantic Convoy Treaty de marzo de 1943 reunió a todos los mandos antisubmarinos aliados en un intento determinado para eliminar a los submarinos alemanes del Atlántico. El final de las operaciones atlánticas de Dönitz llegó con la creación de grupos de apoyo de caza y eliminación a finales de la primavera de 1943. La suerte había cambiado para los submarinos, la más temida por Churchill de las armas de Hitler.

Tácticas antisubmarinas

De todos los hombres dedicados al desarrollo de la guerra antisubmarina británica durante la segunda guerra mundial, ninguno hizo mayor aportación que el Capitán Frederick Walker.
No sólo fue el mayor destructor de submarinos, sino que también creó tácticas de mucho éxito que swe transmitieron a todos los jefes de escolta de la Royal Navy. Para finales de 1942, los submarinos habían aprendido a aprovechar la deficiencia del Asdic a corta distancia y a escapar de las explosiones de las cargas de profundidad mal apuntadas. Walker desarrolló el "ataque envolvente", en el que un navío a velocidad lenta con el Asdic realizaba un ataque normal mientras que otros dos se situaban con sus Asdic apagados, a 45 metros en cada haz. Los tres lanzaban entonces una amplia muestra de cargas que atrapaban al submarino de improviso. Cuando las condiciones Asdic eran malas y era probable que un submarino escapase del contacto, Walker adoptó una técnica llamada "el ataque móvil". Un navío mantenía una distancia de 900 metros con el objetivo, sin intentar acercarse. Al mismo tiempo dirigía a otro navío de escolta a lo largo de la marcación del submarino hasta que navegaba justo delante. El comandante del navío delantera lanzaría entonces 26 cargas por pares a intervalos de nueve segundos. El submarino, consciente sólo del silbido del Asdic distante de su rastreador a popa, se dirigía en línea recta a una alfombra descendente de alto explosivo. Si el submarino tomaba un rumbo en zig-zag evasivo, Walker asignaría tres navíos, guiados desde popa, para crear una "barrera móvil".

Asdic

Cuando los submarinos alemanes comenzaron a navegar a principios de la primera Guerra Mundial, dos cintíficos franceses, Chilowski y Langevin, comenzaron a estudiar modos de detectarlos desde navíos de superficie. Se les sumó el Bristish Board of Inventions and Research, y en 1917, el Antisubmarine Detection Investigation Committe (ASDIC) fabricón un prototipo. Todos los ulteriores desarrollos británicos del prototipo se conocieron como Asdic hasta 1948, cuando se adoptó el vocablo "Sonar" (de Sound Navigation Ranging) de la armada de los EE.UU. Los equipos Asdic instalados en las corbetas de escolta del capitán Walker se hallaban en cúpulas extendidas con forma de pera retráctiles situadas cerca de la proa. Extendida por debajo del casco al utilizarla, la cúpula contenía un oscilador de cuarzo; cuando se activaba con un transmisor, el oscilador emitía un impulso de sonido conocido como "silbido", que se devolvería como un eco por cualquier objeto sólido que encontrase en el agua dentro del alcance del Asdic. El eco sónico lo convertía el oscilador en un impulso eléctrico que podía "leerlo" el operador Asdic. El intervalo entre la transmisión y la recepción del eco le daría la distancia al objeto sumergido, y del tipo de eco, un experto podía calcular su tamaño e identidad. Cuando localizaba un objeto móvil, el operador podía determinar su velocidad y su marcación ajustando el ángulo al que la transmisión Asdic abandonaba el navío. Durante la segunda Guerra Mundial, los barcos de escolta crearían una pantalla Asdic en torno a un convoy. Cada navío dirigía sus transmisiones Asdic sobre un sector dado, extremando así la posibilidad de detectar submarinos dentro del alcance de 2275 metros del dispositivo.